En España, el 20% de los perros que son adoptados desde protectoras son devueltos. Lila es una de esas perritas. Después de más de un año viviendo con una familia, ha sido devuelta a la Asociación Juan Gancedo.
La historia de Lila conmueve a cualquiera. Esta malinois de cuatro años fue rescatada en 2023 de La Cañada Real, en Madrid. Su ángel salvador fue el Policía Nacional Juan Gancedo, quien recuerda perfectamente aquel aviso: una perra en muy mal estado. “Lila estaba acompañada de otro perro, Duque. Los dos tenían parvovirus y, en el caso de Lila, llegó a la clínica con una piometra muy grave. Fue operada de urgencia, además de estar ingresada al borde de la muerte”, cuenta.

Recuperarse del dolor y encontrar el amor: la historia de Lila y su salvador
Una vez recuperada, Lila fue trasladada a una residencia en Toledo. Allí tuvo otro percance: se clavó un hierro en una pata, lo que le causó una infección bastante seria. “Después de eso, Lila pasó a una residencia canina que pagamos desde la Asociación hasta que se le encontró una familia”, explica Gancedo. Una familia que tras más de un año con ella la ha devuelto a la Asociación y es por eso que Lila está de nuevo en adopción.
Y es que Lila es una perra excepcional. Se lleva bien tanto con perros como con gatos, y “la verdad es que este año y pico ha estado genial y bien cuidada, pero ahora han dicho que no se pueden hacer cargo de ella”, comenta el agente, que lo tiene claro: “Tengo que luchar por Lila, porque es muy buena y la pobre vivió un infierno estando encadenada en una casa hasta que la rescatamos. Al final salió adelante y se merece una buena familia que la quiera y la cuide.”
Cuidados veterinarios de Lila
El veterinario clínico Andrés Santiago, quien la operó y ha seguido todo su caso, lo confirma: “Se recuperó fenomenal del parvovirus y no tiene ningún síntoma digestivo, que es lo que le podría haber ocurrido después de haberlo pasado”, asegura. Hoy en día, Lila hace vida completamente normal, aunque recientemente le detectaron Leishmania. “Lo único que implica que tenga esta enfermedad es que se le tiene que hacer una analítica anual para controlarlo. El tratamiento ahora mismo lo tiene pagado y en ese aspecto no hay problema”, explica Santiago.

Lila sobrevivió a lo impensable, ahora necesita una familia que la quiera
Después de todo lo que ha vivido, está claro que Lila se merece una familia que la cuide y la quiera más que nunca.
¿Te animas a adoptarla? Contacto
Asociación Juan Gancedo
Teléfono: 675 75 27 4