Que no los veamos no significa que existan o que hayan existido alguna vez. Sabemos que existieron tigres de Tasmania. También ha habido capturas y avistamientos de calamares gigantes. No sabemos, en cambio, si han existido las sirenas o los yetis, pero culturalmente han llegado hasta nosotros. Sea por la razón que sea, esos animales que no podemos ver nos siguen fascinando y despertando nuestra imaginación. Y a ella apela la nueva propuesta expositiva del Museu de Ciències Naturals de Barcelona Animales Invisibles: mito, vida, extinción, desextinción.
Dragones, cantos de sirena y experimentos genéticos
La muestra explora el fascinante mundo de las especies que permanecen ocultas a nuestros ojos por diversas razones. Aquellas, por ejemplo, que el tiempo ha borrado del planeta, como los dinosaurios, los dodos, apodados los pobres como pájaros bobos porque eran torpes, no podían volar y por eso eran muy fáciles de cazar, o los tigres de Tasmania, inmortalizados por un explosivo personaje de dibujos de los Loony Tunes.

Viggo Mortensen en la exposición Animales Invisibles
También las que viven únicamente en las tradiciones culturales de diferentes pueblos, como las sirenas, que ya tentaban a Ulises, el héroe griego de La Odisea, o los dragones que tantas sagas de caballeros nos han aportado, sobre todo aquí con la leyenda de Sant Jordi. Pero también son especies que no vemos las que, estando vivas, resultan esquivas debido a sus hábitos de vida, como el calamar gigante, surgido de una película japonesa de monstruos, o por el impacto humano sobre sus poblaciones, como el tritón del Montseny, el urogallo o la oveja negra.
La exposición también aborda los intentos actuales de recuperar especies perdidas mediante avances genéticos y expresiones artísticas.

Calamar Gigante, de 20 metros de largo, da la bienvenida a los visitantes al inicio de la muestra
La pérdida constante de especies animales, muchas de las cuales desaparecen sin haber sido siquiera descubiertas, impulsa esta muestra, que busca acercar al público tanto los orígenes y características de estas especies como las narrativas culturales que las acompañan, protegiendo así la diversidad biológica y el patrimonio cultural mundial.
La exposición surge del «Proyecto Animales Invisibles», una iniciativa desarrollada durante más de diez años por el escritor y viajero Gabi Martínez junto al naturalista y explorador Jordi Serrallonga, quienes actúan como comisarios. Sus numerosas expediciones por todo el mundo han dado fruto a una plataforma web colaborativa, publicaciones, artículos, documentales y conferencias, culminando ahora en esta ambiciosa propuesta museística.
Del cretácico a una probeta, pasando por el chupacabras
La exposición se organiza en cuatro secciones diferenciadas, como ya avanza el nombre la muestra: Mito, Vida, Extinción y Desextinción.

Comisarios de la exposición, Jordi Serrallonga y Gabi Martínez, posan junto a la imponente mandíbula del megalodón, un tiburón de 16 metros que habitó los océanos hace 20 millones de años.
En la sección sobre los mitos, se destacan criaturas como el Ts'ikayo, entidad mitad humana mitad elefante según la cosmogonía de los hadzabe tanzanos, una comunidad que mantiene un estilo de vida basado en la recolección y caza. También se abordan figuras como las sirenas y el chupacabras, mito moderno originado en Puerto Rico en 1992 cuando los medios reportaron ataques a ganado por una criatura desconocida. Las especulaciones sobre su naturaleza (extraterrestre, murciélago gigante, o el equivalente latinoamericano del yeti) propiciaron la rápida expansión de la leyenda por Argentina, Perú, Guatemala, Chile y México. Y de ahí a las películas y series de Hollywood.

Ts'ikayo, ser mitad humana, mitad elefante. Dibujo de Anaïs Calabuig.
En la sección de Vida se propone divulgar las especies vivas que raramente observamos, bien por sus características biológicas o por la presión ejercida por las actividades humanas. En el primer grupo encontramos las medusas inmortales, organismos gelatinosos de medio centímetro capaces de reproducirse indefinidamente, los urogallos y el calamar gigante. En el segundo grupo se presentan chimpancés, ovejas negras y el tritón del Montseny, único vertebrado autóctono de Catalunya y uno de los anfibios europeos en mayor peligro de extinción. Los visitantes pueden además escuchar grabaciones de murciélagos y la sinfonía natural de un día primaveral en el Montseny.

Urogallo de la colección del Museu de Ciencias Naturales de Barcelona
En la sección de Extinción, la muestra repasa las innumerables especies extintas que continúan poblando nuestra consciencia colectiva. No se trata de seres legendarios, sino de criaturas cuya existencia pasada conocemos gracias a los hallazgos paleontológicos. Este área incluye una experiencia interactiva para “diseñar tu dinosaurio personal” basada en especies cuyos restos se han localizado en territorio catalán, una maqueta de Pteranodon (ave que dominaba los cielos cretácicos) y la reproducción del célebre retrato del Dodo oxoniense que alcanzó notoriedad mundial tras aparecer en Alicia en el país de las maravillas, convirtiéndose posteriormente en emblema del movimiento ecologista y la protección de especies.
Esta sección también acoge una instalación especial de Antoni Muntadas dedicada al Tigre de Tasmania. El último ejemplar conocido falleció en el zoológico tasmano en 1936, pero paradójicamente mantiene una vigorosa presencia en la cultura popular: protagoniza marcas cerveceras y aparece frecuentemente en productos comerciales como ropa, postales y utensilios diversos. Este depredador es actualmente objeto de proyectos de desextinción tras la reconstrucción de su genoma por parte de la Universidad de Melbourne y una empresa de bioinvestigación, utilizando un cráneo preservado durante 110 años.

Pteranodon
Finalmente, en la parte sobre Desextinción se exhibe la réplica exacta de “Miguelón”, el cráneo más íntegro de la evolución humana, un preneandertal descubierto en la Sima de los Huesos de Atapuerca. También se muestra la representación a escala real de una mujer neandertal y la mariposa Xerces azul, cuya reciente extinción provocó el colapso del ecosistema dunar costero de San Francisco. Actualmente se desarrolla un proyecto para su recuperación que podría abrir camino a la restauración de otros polinizadores. La sección se completa con un mural sobre desextinción creado por la artista Lily Brick.
Animales visibles en la ciencia, arte y cultura
La innovación de esta muestra radica en conectar dos universos tradicionalmente separados: el científico y el artístico. Esta estrategia museográfica multidisciplinar combina las colecciones científicas del museo con creaciones de una amplia variedad de artistas contemporáneos.
La experiencia comienza con una pieza audiovisual introductoria donde Viggo Mortensen presenta la exposición, combinando su interpretación con la banda sonora original compuesta específicamente por Rafel Plana para Animales Invisibles.

Instalación del Tigre de Tasmania de Antoni Muntadas
El recorrido integra piezas taxidérmicas, estructuras óseas, restos fósiles, reproducciones, contenido audiovisual divulgativo y especímenes preservados, junto a instalaciones contemporáneas, arte mural, esculturas, propuestas conceptuales, ilustraciones, cómics, fotografía, cine, tatuajes y literatura.
Entre los treinta artistas participantes se encuentran figuras como el actor Viggo Mortensen, los fotógrafos Joan Fontcuberta y Txema Salvans, los artistas conceptuales Antoni Muntadas y José Luis Viñas, la muralista Lily Brick, el compositor Rafael Plana, el cineasta Víctor Matellano, el especialista en arte digital Vicente Matallana y la tatuadora Paola Garmo.

Dibujo de una mujer Neandertal a tamaño natural
En definitiva, todo un despliegue museístico, artístico y científico por parte del Museu de Ciències Naturals de Barcelona que hace más visibles que nunca a los animales invisibles.
Más información:
Exposición: Animales Invisibles